BREVE HISTORIA DE
CÁCERES
XXV
Primera
Conquista de Cáceres.
Crónica
desde la calle Cuba de mi Llopis Ivorra
Andaba el
monarca leones Fernando II, pensando en ocupar la plaza de Badajoz, pero al fin
lo dejo para otra campaña, dejándola en manos del moro, entregándola con todo
el botín cogido a los portugueses al gobernador de la ciudad, Umar Ben Timsilt,
con promesa de vasallaje, y con fecha de 21 de mayo del año de 1169, levantó su
campamento, con la intención de retirarse a sus estados.
Pero los
sucesos de Badajoz, habían dado experiencia al de León, acerca de dos extremos
con mucho fundamentos, el primero de ellos fue, que a los musulmanes lo que más
les interesaba era consolidar sus posiciones en la Cuenca del Guadiana, el
segundo , que su suegro el Rey de Portugal, habia hecho de Badajoz, el objetivo
inmediato de sus conquistas valiéndose de Geraldo de Sampavor, para que este le
sirviera de enmascaramiento de sus intenciones, lo resultaba que Portugueses y
Musulmanes, y cada cual mirando para lo suyo, estaban decididos a estorbar en
lo posible la expansión del reino de León hacia el Sur.
Para
evitarlo, Fernando II, ordeno inmediatamente tomar medidas, y al retirarse de
Badajoz, se internó por la parte del Oeste de las sierras, ocupando el castillo
de Alburquerque, que aun no siendo fronterizo con Portugal, si estaba ubicado
en la articulación de las Sierras de San Pedro y san Mamed, sobre una elevación
desde donde se dominaba todos los caminos y accesos desde el vecino reino de
Badajoz, dejo Alburquerque destino Cáceres, con la intención de ocuparla, con
seguridad la fortaleza de Hins Qazrix no se resistió, ya que Fernando II de
León, la tomó en corto espacio de tiempo, siguiendo después hacia el Norte del
Tajo, ocupando el castillo de Portezuelo, más tarde los de Cabeza de Esparragal
y Gata, entregándolos a la Orden del Temple.
¿Qué fue
de Geraldo de Sampavor?
Apenas
conseguida la libertad, volvió a las andadas, reclutó gente en Santarém y
mozárabes de todas las procedencias, llegando a juntar un ejército de
consideración, el de Portugal, Alfonso Henriques, le dejaba hacer, el
guerrillero corría los campos a su placer, destrozando cosechas, robando
ganados, y llevando a gran quebranto a muchas ciudades y pueblos moros, se
atrevía incluso a secuestrar a varios personajes almohades, estos tuvieron que
pagar a muy buen precio su libertad, y todo esto a lo largo del rio Guadiana,
toda vez que ya no se atrevía a pasar la vertiente del rio Tajo.
En abril
de 1170, Sampavor puso a Badajoz al borde de la hambruna, la poblacion quedó
encerrada dentro de sus muros, y todo los alrededores a muchas leguas de
distancia quedaron asolados, el
guerrillero con sus hueste merodeaban el entorno, apoderándose de todas las
provisiones con las que se intentaban abastecer la plaza, en demanda de auxilio
acudieron los moros al Califa Abu Ya’Qub, ya se habían olvidado del vasallaje
debido a Fernando II de León, Ya’Qub, envió desde Sevilla un convoy formado por
más de 5000 acémilas cargadas de víveres, forrajes y armas, el convoy iba
protegido por una nutrida tropa al mando del hafiz Zakariya Ben Ali, más
Geraldo les salió al camino, evitando que el convoy llegara a su destino, con
su gente Sampavor, derroto la escolta en combate, en el trascurso de este
Zakariya tambien perdió la vida, apoderándose de toda la carga.
Este
suceso, terminado con éxito por parte del aventurero portugués, hizo que
Alfonso Henriquez, saliera de su aparente pasividad, y a finales de 1170,
regresa con nuevos bríos a intentar apoderar de Badajoz con la ayuda de Geraldo
de Sampavor, pero Fernando II, al tener noticias de que de nuevo esta la plaza
en peligro de caer en poder del Portugués, acudió con su ejército, lo que hizo
que los portugueses desistieran de sus intenciones, retirándose con
precipitación, Geraldo se refugió en el castillo de Urumeña, tras el llegaron
,los moros en su persecución del que pudo salvarse dándose a la fuga.
Desde
entonces la suerte del aventurero le empezó a ser esquiva, Alfonso Henriques,
le retiro su favor, pero aun anduvo haciendo razias y merodeos por toda la
Cuenca del Guadiana entre 1171 y 1173, pero con la indiferencia de su Rey, y la
vigilancia constante de Fernando II, estaban poniendo freno a sus tropelías, y
como no, la furia de Abu Ya’Qub, que estaba deseoso de vengar los desastres que
el portugués le habia causado. Acorralado por todas partes y casi abandonado
por sus partidarios, (ya casi solo le quedaban 350 hombre) pensó en rematar sus
aventuras, y lo hizo y de una forma desastrosa.
En el 560
de la Hegira, entre el 12 de agosto de 1173 y 1 de agosto de 1174, Sampavor con
su escasa tropa, se presentó ante el Califa en Sevilla, y sumiso se ofreció
como esclavo, para servirle y hacer daos a sus hermanos cristianos, Abu Ya’Qub
aceptó su sumisión, ordeno que se le atendiese y honrase. Más Geraldo de
Sampavor, empezó enseguida a ponerse en contacto con Alfonso Henriques, su
antiguo señor, planeando entre ambos una nueva traición. Pero sucedió que el
Califa no le perdía de vista, al no fiarse de él, enseguida descubrieron sus
manejos, los musulmanes, cogieron a Geraldo de Sampavor y a todos los suyos y
los enviaron a Siyilmasa (Tafilite) encerrándoles en mazmorras y bajo constante
vigilancia, y aun así preparó su evasión, siendo sorprendido, el califa Abu
Ya’Qub ordeno lo decapitaran.
Este fue
el final de aquel inquieto guerrillero, el primer cristiano que entro en
Cáceres, hombre astuto y valeroso, y con gran capacidad militar.
Los
Fratres de Cáceres
Corría un
año de extraordinario interés en la historia de Cáceres, la fortaleza, ya villa
que empezaba de nuevo a nacer, se encontraba en poder de los cristiano, estamos
en el año de 1170, y defendida por un lúcido plantel de caballeros principales,
ya de Alcántara a Monfragüe, no habia
rastro de moros, y las llanuras del Salor al Ayuela, comenzaban a poblarse,
sobre todo a los bordes de la calzada romana, el conde Castellano don Gonzalo
de Marañón, que habia sido Alférez del emperador Alfonso VIII y que en diversas
ocasiones estuvo a las órdenes de Fernando II, fundó muy cerca de la tierra de
los sarracenos y a la vista del castillo de Montánchez un poblado o casar que
dio su nombre y que más tarde algún sucesor suyo, le habría de llamar las Casas
de don Antonio,.
Ibn
Jalis, un morisco al que los cristianos llamaban Abençales, construye otro
caserío sobre las ruinas de la mansión Ad Sorores, con una pequeña atalaya, que
más tarde pasaría a poder de la Orden de Santiago, y que por esta razón laso a
llamarse Santiago de Bencaliz. Un tal Pedro Cervero, venido con la hueste
leonesa, funda en la parte más alta de la divisoria de los valles del Ayuela y
del Salor, una granja, que se llamó entonces de Pedro de Cervero, lo que hoy es
dehesa la Cervera.
Así las
cosas daban a entender que el territorio cacerense, nacía de nuevo a la vida y
que los peligros de tierras fronterizas quedaban al olvido, y retirados tras la
sierras del Sur, de que el moro parecía no se atrevía a cruzar, en estas,
varios caballeros de la guarnición cacerense acordaron fundar una Orden
Religiosa y Militar, que tuviera como todas sus semejantes, dos fines
principales, la defensa de la religión y la lucha contra los infieles,
dedicándose durante la paz, a guardar y proteger los caminos de las
peregrinaciones a Santiago. Escogieron a este Apóstol como su protector
celestial y al Obispo de Salamanca como su patrono y valedor temporal, el Rey
don Fernando II, presto su aquiescencia y conformidad, donando a esta naciente
Orden Militar, la villa recién conquistada de Cáceres.
El día 1
de agosto del año de 1170, la congregación de los Fratres de Cáceres, quedaba
fundada, adoptaron sus caballeros como insignia una cruz roja en forma de
espada, con los remates de puños y gavilanes floreteados, establecieron su casa
en una iglesia de Cáceres, extramuros, muy cerca de la Puerta de Coria, en una meseta
en el declive hacia la ribera, declive que desde los tiempos del primer Maestre
don Pedro Fernández, se venia llamando la Cuesta del Maestre.
La Orden
cambió pronto de nombre, la crónica la llaman en los primeros tiempos de
Ordinem de Cáceres, Milites de Cáceres o Fratres o Freyres de Cáceres, pero a
cambio de sus insignias fue conocida como de fratres de la Espada, hasta que al
final del siglo XII comenzó a ser denominada Orden de la Caballería del Señor
Santiago.
La orden
de los Fratres es considerada de origen De la orden de Santiago según las
referencias que se conservan de la época fue el rey Fernando II de León en el
año 1170 quien fundó la orden de los fratres, confirmado después por bula del
Papa Alejandro III 5 años después. El objetivo inicial de esta orden era apoyar
la reconquista cristiana de aquellas zonas que estaban ocupadas por los
musulmanes en la Península Ibérica y defender a los peregrinos que realizaban
el Camino de Santiago. Doce caballeros liderados por Pedro Fernández, señor de
Fuentecalada canónigo y militar español, al que se le considera fundador y
primer maestre de la Orden de Santiago.
(Fuente
Floriano Cumbreño-Historia)
(Fuente
Publio Hurtado-Castillos)
(Fuente
Carlos Callejo-Origenes)
(Fuentes
Orti Belmonte-Conquistas)
Agustín
Díaz Fernández
Comentarios
Publicar un comentario